Corresponsalía abril

Recibimos la siguiente Corresponsalía del Centro de Estudios de la Casa de los Pueblos.

Oaxaca, México, abril del 2020.

Semanas de trabajo cooperativo, organizativo…Y la lucha sigue.
Compañeras, Compañeros, Compañerxs; además de saludarles, queremos informarles
como hemos decidido enfrentar la crisis de enfermedad por la que atraviesan los
mundos.

Primero. Estamos conscientes, en diferentes momentos de la historia, los
pueblos hemos tenido que enfrentar múltiples epidemias.

Durante la invasión y saqueo de los pueblos de américa por los europeos en el siglo XVI: la viruela, el tifo, el cólera y la sífilis, provocaron una hecatombe demográfica.

En 1812, durante la guerra de independencia, se diseminaron intencionalmente la fiebre y el tifo para diezmar las rutas y sitios de las tropas insurgentes comandadas por José María Morelos.

En Oaxaca, entre 1750 y 1880, se sucedieron plagas y epidemias que diezmaron
poblaciones y reorganizaron la distribución de los pueblos, los circuitos
mercantiles y las relaciones con las ciudades.

De 1882 a 1921, encontramos registro de las siguientes epidemias: cólera en
Chiapas, Oaxaca y Tabasco de 1882-1883, en 1915 el istmo de Tehuantepec; fiebre
amarilla en Sinaloa en 1889, 1902 y 1903; peste bubónica en Baja California y
Sinaloa en 1902-1903, en Mazatlán el registro fue de 529 muertes; fiebre
amarilla en Veracruz entre 1903 y 1905, tuberculosis en 1907, sífilis en 1908,
en 1910 sarampión; tifo en el centro-sur, incluida la capital de la república
en 1911, 1915 y 1916. En el primer semestre de 1915 el panteón de Dolores
registró 9,788 entierros y para 1916 se tenía un registro de 12,149 muertes en
la capital; en 1918 la influenza española dejó 500,000 muertos más, en el país.

En relación con las epidemias, los mecanismos de inmunización eran y sieguen
siendo precarios y eran y siguen siendo parte del escenario de guerra. Las
enfermedades repuntaban por ciclos y se recrudecían según la temporada del año:
en frío aumentaba el tifo, con calor aumentaban el cólera, dengue y paludismo.
El hambre era y sigue siendo permanente.

Diferentes misivas de generales revolucionarios y de familiares de Emiliano
Zapata permiten conocer que de 1914-1915 él estuvo enfermo de algún
padecimiento prolongado, que no impidió que la revolución siguiera en
movimiento (Pineda, 2013: 56-110).

La revolución del sur generó uno de los más grandes proyectos de salud
comunitaria y asistencia a heridos en combate. La medicina de guerra desde
abajo, desde las prácticas históricas de los pueblos insurrectos, desde los
contingentes de trabajadores de la salud, en las columnas y en los pueblos, en
las montañas y los trenes, en el territorio cuerpo de las personas y en el
territorio insurgente, operaba con un plan general que organizaba los centros
de atención y los hospitales desde la perspectiva revolucionaria para cubrir el
territorio liberado. Otra experiencia similar en la historia es el
tren-hospital de la División del Norte.

El  Ejercito  Libertador  del  sur  tenía  como
 prácticas  de  sanidad  y  atención,  la
canalización  de  enfermos  y  heridos  a
 hospitales  de  campaña instalados  en  Cuernavaca,
Cuautla, Toluca y México; tenía enfermerías en Jojutla y Chiautla, así como
puestos de socorro  en  Huitzilac,  Peñón  Viejo,
 Iztapalapa,  Mexicaltzingo,  San  Mateo  y
 Topilejo, atendidos por médicos, pasantes, estudiantes de medicina,
enfermeras y enfermeros, por mujeres, hombres, niños y ancianas que sumaban
colectivos, recolectaban, transportaban y eran correos entre los pueblos. Se
formaban brigadas sanitarias que también eran comandadas por mujeres como María
Guadalupe Muñiz y Dolores G. Pliego que luchaban por el cumplimiento del Plan
de Ayala (Pineda y Castro, 2013: 214).

Se colectaban cargas de maíz, ropa, leña, vendajes, medicamentos para los
heridos, zacate y cobertores para los hospitales, con obreros y campesinos en
Contreras y Morelos. En los diferentes rumbos del territorio se sentaron
precedentes del futuro sistema de derecho a la salud que se irá construyendo a
pesar de todos los obstáculos del poder. Es así, un aporte de los pueblos, no
del Estado.

Emiliano Zapata atendió con mucha dedicación las tareas para resolver las necesidades del colectivo social: auxilio económico, víveres, vestimenta y semillas para sembrar; abasto de leña, forraje y aparejos; resolución de diferendos sobre  tierras,  chinampas,  bosques,  agua,  ganado,  herencias  y  casas  habitación; impartición de justicia, asuntos judiciales, funcionamiento recto de los ayuntamientos, educación y salud; operación de caminos, correo, telégrafo y ferrocarril; comercio, producción de las fábricas de azúcar, fábricas textiles y fábricas de papel, minas,  construcciones.

Cuando hay una crisis, una guerra, enfermedad, quienes padecemos los nuevos mecanismos de control y segregación impuestos por el poder y quienes ponemos los muertos, somos nosotros, los pueblos. Como somos los pueblos los que, a pesar de la precarización y represión generamos alternativas que construyen vida.

Hoy como ayer insistimos, como nos enseñó Zapata; las necesidades del colectivo social se resuelven con organización y lucha; construyendo salud comunitaria, construyendo Autonomía, sembrando la tierra, compartiendo los frutos de la siembra y el trabajo colectivo, que hermana, que nos hace compañeros.

Centro de
Estudios de la Casa de los Pueblos.




MAYO, mes de historia digna, mes de lucha

Este mayo se cumplen 134
años  de que se iniciara la huelga de
1886 en Chicago,  por mejores condiciones
laborales, la participación organizada de miles de mujeres y hombres
trabajadores, su exigencia, la participación en las jornadas de lucha por la
consecución de la jornada laboral de 8 horas y la consecuente represión a los
sindicalistas anarquistas dio origen al asesinato de los Mártires de Chicago.
Ante el  capitalismo salvaje  que históricamente  le tiene sin cuidado el dolor de los pobres,
a sangre y fuego y enfrentando la represión, 
la organización de luchas de trabajadoras y trabajadores, organizados
política e ideológicamente generación tras generación se abrió paso.  Aprendió a resistir el capitalismo de esa
época,  y en esa constante lucha
alimentó  valores propios de los
trabajadores como el compañerismo, la solidaridad,  conciencia de clase, espíritu de sacrificio,
etc. y llevó a heredarnos lo que hoy conocemos como Día
Internacional de los Trabajadores,
que no Día del Trabajo.

Fotografías compuestas de niños trabajadores, entre 1908 y 1911, por Lewis Hine. Cada retrato es la suma de diversas exposiciones a varias niñas y niños, sometidos a labores intensas en el sector algodonero de los Estados Unidos.

Ya en este año 2020, en
mayo… ¿Cómo se encuentra la clase trabajadora?  
Como nunca!!!….., encerrada en sus casas, algunos todavía con trabajo,
aunque  la gran mayoría de trabajadores
de manera silenciosa ya no lo tienen y ni cómo reclamar,  si hay cientos de patrones que ni siquiera
los tiene registrados como tales. La ley que originalmente estaba plasmada en
el artículo 123 ha sido modificada “N” número de veces a conveniencia de
presidentes, diputados, senadores, de “N” partidos políticos que también “N”
veces han cambiado de nombre, queriendo parecer diferentes,  pero que sus “reformas estructurales”,
benefician a unos cuantos, y de manera totalmente inequitativa se apropian del
producto del trabajo de los que somos mayoría: 
la clase trabajadora.

Indudablemente la realidad
nos lleva a no perder de vista, ese renglón que aunque traten de ocultarlo, de
disfrazarlo, de aparentar que somos iguales, la terca realidad saca a flote la
tantas veces escuchada, temida, vilipendiada por unos, aprovechada por otros,
la lucha de clases que históricamente ha existido.

Prueba de la desigualdad,
un botón de muestra:  https://www.forbes.com.mx/millonarios-mexico-2020/

“La fortuna de
las cinco familias más acaudaladas del país equivale a 25 por ciento –la cuarta
parte– de los ingresos de todo un año de las casi 35 millones de familias
mexicanas. Lo anterior, aunque son conceptos distintos, coinciden
especialistas, refleja la enorme desigualdad que hay en México”.

https://www.jornada.com.mx/2020/04/16/economia/018n2eco

Lewis Hine viajó a través de los Estados Unidos a inicios del siglo XX, como parte del National Child Labor Comitee (NCLC, en español: Comité Nacional de Trabajo Infantil), documentando el trabajo infantil en fábricas, talleres textiles, minas de carbón y empacadoras.

¿Quienes son esos 5?

Según datos de la revista Forbes México, la riqueza de las familias de Carlos Slim, Ricardo
Salinas Pliego, Germán Larrea, Alberto Baillères y María Asunción
Aramburuzabala asciende a un billón 736 mil millones de pesos.

Ellos si no dejan de pensar y buscan cómo
consolidar su dominación  y sacar
ganancia de la crisis para continuar y acrecentar sí su fortuna y por ende
acrecentar la desigualdad aumentando la explotación, sin preocuparse por las
injusticias. No duermen, siguen organizándose y viendo cómo salir adelante
ellos con sus fortunas de la crisis económica que también “sufren” y se
lamentan. Esperan con ansia el cambiar “Quédate en casa” por el “Regresen a
trabajar”.

Estas imágenes compuestas no fueron publicadas durante la vida de Lewis Hine, aunque varios de los niños retratados para su realización, fueron retratados también -individualmente- para la denuncia pública del trabajo infantil por parte de la NCLC.

Indudable que los trabajadores, aún en
casa, tenemos que pensar cómo organizarnos 
para que no finiquiten al mundo (Nuestro Mundo), que continúen
destrozando la naturaleza, que no disminuyan los derechos de todos los humanos
sin importar del país que seamos, que terminen con los pocos espacios de
democracia que nos quedan. No podemos permitir que frenen la potente marcha de
las mujeres, -brujas, medio brujas y no brujas-, en el respeto a su persona y a
terminar de una vez por todas con los resquicios de fin al machismo que empieza
a despuntar en la cultura machista del mundo entero.

No podemos consultar a nuestros
antepasados que vivieron pandemias en sus generaciones para que nos digan cómo
“libraron” la situación… pero lo hicieron, aún con las carencias técnicas y
científicas de aquella época; pero si pudiéramos preguntarles sin duda nos
dirían que ahora tenemos avances científicos y tecnológicos que deben estar al
servicio de la humanidad y no del “dinero”, que la salud no es una mercancía,
que la ciencia y la tecnología debe también servir a todos los grupos
sociales y sobre todo, a los explotados que son quienes están más expuestos a
la infección. Todos los proletarios, las trabajadoras y los trabajadores del
mundo, haremos realidad aquellos lemas de por más de 150 años han coreado tales
como ¡por una sociedad sin clases!, y ¡por un mundo sin fronteras!, sólo ellos
podrán vencer cualquier pandemia.

El trabajo de Lewis Hine, que en más de una ocasión lo puso en peligro de muerte, permitió que la NCLC tuviese impactantes documentos gráficos que sumaron voces a favor de un cambio legal para prohibir el trabajo infantil en los Estados Unidos, con el Acta de trabajo infantil de 1916.

EFEMÉRIDES

En mayo, mes de historia digna, no
olvidamos a nuestro compañero Ismael, compañero-pilar que dio cimiento firme a
la consolidación de las Fuerzas de Liberación Nacional como organización
revolucionara, artífice  (junto a Mario y
Ruth) de nuestro órgano de comunicación interna “Nepantla” en 1979; redactor de
los Estatutos de 1980 y eslabón que dio continuidad a lo iniciado por nuestros
compañeros fundadores en el trabajo con los compañeros indígenas que hicieron
nacer al Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Mayo nos repite como lección, sin aprobar
todavía, que no debemos dejar de continuar con la  organización y resistencia, tal como nos
enseñaron los pobladores de San Salvador Atenco en aquel Mayo en que los
gobiernos en turno, al servicio de intereses trasnacionales, intentaron socavar
su lucha; otra lección pendiente de aprobar todavía, es la tenacidad y
perseverancia de la lucha de las viudas de Sartaguda en Navarra, siempre
presente como ejemplo en la lucha por los desaparecidos.

¡Vivan los trabajadores del mundo!

¡Vivir por la Patria! o ¡Morir por la libertad!

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.