Solidaridad con la Catalunya republicana, ante los embates imperialistas.

En 2017, desde la Casa de Todas y Todos, celebramos el bicentenario de la muerte de Xavier Mina. La oportunidad sirvió para cimentar puentes solidarios entre las luchas solidarias de pueblos que, siendo diversos, tienen en común la opresión imperialista. Desde estos puentes de palabras, han llegado amables voces que nos avisan sobre la amplitud de las movilizaciones sociales en el Estado español, de dimensiones impensables hace apenas un año. Recordando ciclos pasados, como la efervescencia que vivieron Mina y Fray Servando en el siglo XIX, como el mayo del 68 de hace cincuenta años, hoy se vive en las calles un resurgimiento social y político de los pueblos, impulsado en buena medida por la Catalunya republicana, que está dando grandes lecciones de resistencia y lucha democrática.

Los esfuerzos independentistas de Catalunya están desnudando en sus miserias a un Estado español autoritario, heredero directo de una dictadura criminal, el cual hace uso de todos sus poderes para reprimir y vengarse de sus adversarios políticos. El principal responsable de esta situación es el máximo representante de ese Estado, jefe de sus fuerzas armadas, el monarca, ciudadano Borbón. Ya en su mensaje a finales del año pasado sobre la situación política, en el contexto de la Catalunya independiente, dejó en claro la naturaleza antidemocrática de su posición y su postura.

En este contexto, a pesar de la solidaridad popular con las causas independentistas y su victoria en las urnas, la mayoría de los Estados, en Europa y fuera de ella, han dado la espalda a Catalunya. Alemania, hace unos días, ha dado un paso más encarcelando al president Puigdemont. Es por ello que en los últimos días en toda Catalunya se han dado masivas concentraciones, manifestaciones y cortes de carreteras. Han habido enfrentamientos con la policía en varios puntos, por más que las manifestaciones y movilizaciones sean de carácter pacífico. En Euskal Herria han habido movilizaciones y se mantiene un franco apoyo al pueblo hermano.

La solidaridad internacional es muy importante y necesaria en momentos como este. Es hora de que, como pueblos, abracemos la defensa de la democracia, de los derechos humanos, de la libertad plena que como pueblos merecemos, cuyo suelo imprescindible debe ser el derecho de autodeterminación.

Es por ello que en todo el mundo, pero particularmente en el Estado español, comienzan a aflorar con claridad las acciones políticas de estudiantes, intelectuales, organizaciones sociales y políticas, grupos antifascistas y de la más diversa índole; todas estas formas de lucha, todas estas voces, serán la barricada que ha de frenar el autoritarismo, en un momento en que, al menos, se ha mostrado ya con claridad el absurdo histórico que es querer vestir de democrática a la forma política que le es contraria: la autocracia. Catalunya no quiere rey, quiere independencia, y así lo ha expresado en las urnas.

Desde México, humildemente, la Casa de Todas y Todos, nos unimos a este llamado solidario; haremos lo que esté en nuestras posibilidades para apoyar el esfuerzo catalán por conseguir su independencia, y apoyaremos los esfuerzos de otros pueblos que, desde su inalienable derecho, busquen la realización de su libertad.

Un abrazo, ¡venceremos!

Grupo Editorial de la Casa de Todas y Todos.

* Fuente de la imagen: http://blogs.deia.com/desmarcados




Marzo, mes de lucha

En marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer y en las efemérides, recordamos al compañero Alfredo, formador moral de muchos compañeros a través primero de su ejemplo y posteriormente en los comunicados emitidos desde la montaña; a la compañera Anita, quien consagró su vida a la causa de la liberación de los pueblos, y a nuestra inolvidable compañera Lucha, en el mes de su nacimiento.

Tenemos muchas Luchas: Lucha acompañando en viajes, Lucha en la intendencia, Lucha llevando las cuentas “al pie de la letra”; Lucha al cuidado de sus animales, Lucha “mamá” y luego “abuela” de muchos compañeros; Lucha como educadora en todos los ámbitos; Lucha como compañera de muchas mujeres que dejaron su vida y cumplieron su compromiso de “Vivir por la Patria o Morir por la Libertad”.

Una de ellas, la compañera Ma. Luisa… quien en nuestros Nepantlas, el No. 9, correspondiente a Marzo de 1980, y por el Día Internacional de la Mujer, como un homenaje a las mujeres que, en el escalón más alto de la especie humana, han luchado por la liberación de su pueblo, se presentó una página de una especie de Diario que llevara María Luisa que aquí reproducimos.

Se hacen necesarias algunas aclaraciones: a) “Tamarindo” era el nombre de su perrito, un simpático salchicha alemán; el texto está inconcluso; y c) al momento de escribirlo, nuestra compañera tenía 14 años.

Del Diario de María Luisa…

“Mis días son vacíos y nada más esperan ser llenados de cosas interesantes. Así como si fueran una caja lista para ser llenada de montonal de chucherías interesantes.

Hoy caminaré por un lugar con muchos árboles, me iré con “Tamarindo” y correré y jugaré. Al regresar estaré deliciosamente cansada, me sentaré en mi sillón. Estoy leyendo “La última Tentación de Cristo” de Nikos Kazanzakis. Me gusta. Estoy feliz. Tengo una cama donde dormir, comida si la deseo, un perro, discos, libros y bastantes árboles y pasto y flores. Además, gente agradable con la cual puedo hablar si lo deseo. y leeré
Estoy muy triste, he pensado en todas las personas que no tienen lo que yo tengo. En todas las personas que han muerto, mueren y morirán por que todos tengan lo que yo tengo.

La gente tiene hambre, frío y todo lo demás. Me preguntan: ¿Qué es ser comunista?, la contestación para mí es: “Desear realmente que todo el mundo tenga comida, casa y libros y además, ser capaz de morir para esto”.

Soy simplista, lo sé, Hugo me discute que no sabe qué tanto grito si ni he leído El Capital, ni otras numerosas obras de Marx, Engels y todos esos cuates. Con qué derecho quiero igualdad si no tengo 20 años de experiencia como militante. Cosas como esas. Qué imbéciles. Pienso algo de todo corazón y es una convicción que está hasta el fondo de mí y no necesito leer para saber que todo el mundo tiene derecho de comer.

Claro está que si quiero hacer algo, tengo que estudiar. Ver los fracasos de otros para no caer en el mismo error y ver los triunfos y aprender. Tengo que leer historia para entender realmente cómo van las cosas y tengo que leer historia de México para entender…..” (se interrumpe el texto).

Grupo Editorial de la Casa de todas y todos.